Me ahorcaría con tus pestañas, guapa.
Y entonces esa muñequita, que cortaba la respiración con cada golpe de cadera, sonrió orgullosa al comprobar la efectividad de su reciente adquisición cosmética: un serum fortalecedor de pestañas que las hacía lucir tan largas y tan espesas que al aplicar el rizador se podría surfear en ellas, tanto que ni los 20,5 metros de altura del andamio pudieron evitar que la frágil muchachita satisficiera los deseos del imprudente albañil rodeando su cuello con aquellos tentáculos de seda.
me piace tanto! ;-) -Javier Barrado-
ResponderEliminarMe gusta que te guste :)
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