martes, 1 de enero de 2013

CASAS

Cuando compras una conciencia nueva te cambia la vida.

Yo adquirí una recientemente: 120m2, cuatro habitaciones (a estas alturas cada remordimiento requiere su espacio), exterior a otras conciencias, luminosa y bien amueblada. Dispone asimismo de dos cuartos de baño con bañera para desintegrar cadáveres. Escogí un octavo con ascensor; reconocerán que subir escaleras a la conciencia da mucha pereza. 

Una conciencia no es para vivir de continuo, así que sólo me acerco de vez en cuando para airear las habitaciones cerradas y para comprobar que no me olvidé a nadie en el último desayuno.

jueves, 13 de diciembre de 2012

BIBLIOBÚS

Leía en los autobuses porque lo suyo era pavor a quedarse quieta. Escogía el libro en la misma estación y compraba un billete en función de la extensión de la obra elegida. Solía decantarse por las novelas de más de cuatrocientas páginas, que requerían de un trayecto largo, al menos siete u ocho horas, ida y vuelta, siempre con destino en el mar. Si miras al mar, nunca estás quieto. Caminaba desde la estación en dirección al puerto y, cuando llegaba, se abandonaba al movimiento del agua hasta sentir que se hundía por dentro. Entonces respiraba hondo y volvía a la estación.
Siempre acababa el libro antes de volver, aunque para ello tuviera que convencer al conductor, con su semiautomática  apuntándole a la nuca, de que a 80 kim/h se reduce el riesgo de accidente.

sábado, 7 de julio de 2012

DELE (i) TE

Nunca entendí por qué los escritores sentían pavor ante la hoja en blanco. Al fin y al cabo, cada uno de ellos guarda un  proyecto inmaculado en su mente que quedará manchado de tinta negra, imperfecto, marcado para siempre y sin posibilidad de recreación, de rectificación.

Adoro mi oficio, adoro los rostros desencajados, ojerosos y amarillentos que acuden a mí para que "les haga un trabajo".

¡Ayúdeme, líbreme de mi obra!


Acuden con manuscritos manchados de grasa y vino. Yo leo las primeras páginas para comprobar el alcance del desastre, por si encontrara la obra digna de redención y el deseo de destruirla fuera solo consecuencia de una depresión o un ataque de locura. Hasta ahora, no se ha dado el caso. Algunas veces el libro ya va por su sexta edición y los escritores vienen a mí con pocas esperanzas de éxito. No hay ningún problema, caballero -respondo con una sonrisa suave - no quedará grafía en libro ni recuerdo en la mente de sus lectores. 
Después los dejo solos, al escritor y a su engendro, durante unos minutos. Cuando regreso y tras verificar que asiente con la cabeza, borro ante sus ojos aquellos diálogos cutres que aspiraban a lascivos, esas otras ridículas disecciones del alma humana y las 53 repeticiones del adverbio "absolutamente".
Si por su mala fortuna la editorial ya ha vendido los derechos de la obra a un estudio cinematográfico, también me tomo la molestia de eliminar al director, al productor y al guionista; incluso al actor principal, si es necesario.

El escritor recupera intacta su idea al final del proceso. Él sale de mi despacho con una gran sensación de alivio, caminando un par de centímetros por encima del suelo. Yo experimento un placer similar a la excitación.



martes, 5 de junio de 2012

COMUNICANDO

Hace cinco años Marga decidió que no tenía nada más que decir, desenroscó el micrófono del teléfono y llenó los circuitos de chupito de piruleta. Contra todo pronóstico, siguió recibiendo las mismas llamadas de las mismas personas. Durante meses. Sus interlocutores apenas notaban nada extraño, de no ser por que Marga se había vuelto mucho más dulce y porque, al colgar, sentían una euforia artificial y perdían momentáneamente el equilibrio.

Para Marga, sin embargo, las conversaciones eran igual que siempre.

viernes, 25 de mayo de 2012

APUNTES PARA UN DES-CUENTO, DE JACOBO SUEÑA

Los que siempre pierden tienen en la frente una cruz cainita invisible .Aunque se miraran en los espejos, que nunca lo hacen, no serían capaces de ver sino una pequeña marca, y la achacarían a algún accidente infantil con los años olvidado. Los que siempre ganan pueden ver esa cruz. Algunas veces los que siempre pierden dejan escapar uno o dos absurdos ayes. Entonces los que siempre ganan se incomodan y a veces incluso inventan la caridad o alguna religión o teoría neurocientífica. Los que siempre pierden agachan la cabeza avergonzados y aprenden a suspirar hacia adentro.

martes, 17 de abril de 2012

ASALTO

Me llamas por detrás por si me doy la vuelta y ves a otro. Por si quiebran las baldosas las suelas de mis zapatos y me estrello en cristales contra el terrazo. Me llamas por detrás entre dos vértebras, clavando las palabras al esófago, sin que mi aliento pueda revivirlas, las siento agonizar en la garganta.

Te cruzas el abrigo, te lo abrochas, y caminando vuelves a tu casa.


sábado, 31 de marzo de 2012

CATÁSTROFES NATURALES

Las huellas nevadas del caminar taquicárdico de Hortensia Arteta revelan un  trazado electrocardiógrafico que sugiere la presencia de una acumulación de desgracias de sesenta y siete metros de espesor. Sus vecinos, que lo saben todo, contienen la respiración cada vez que Hortensia Arteta se lleva la mano al pecho, temerosos de quedar sepultados por una gran avalancha.